Una de las aplicaciones más básicas y sencillas de montar son las baldas de cristal.
Dichas baldas se pueden fabricar de varias formas y con materiales distintos. Tenemos por ejemplo baldas de cristal con vidrio monolítico, o baldas de cristal laminado que puede ser incoloro o mateado (translúcido), en cuanto al espesor tenemos que tener en cuenta la función que desempeñan y si van a sostener mucho peso en ese caso un vidrio monolítico de 6 mm o un laminado de 3+3 siempre son la opción correcta, aunque es lo aconsejable se pueden hacer baldas de mayor o menor grosor.